HOMETOUR: MINICASA EN SUDÁFRICA

Si sois de l@s que, como yo, no os basta con los blogs y las revistas, y cuando encendéis la tele también buscáis programas de decoración, a estas alturas ya habréis oído hablar de las llamadas tiny houses - minicasas para nosotr@s ;) - gracias a alguno de los programas que Divinity dedica a este movimiento arquitectónico y también social que apuesta por un modo de vida sencillo.

Las minicasas están de moda y aunque hace ya años que encontrábamos soluciones ingeniosas, definitivamente de un tiempo a esta parte las opciones disponibles se han multiplicado. Entre todas ellas, yo me quedo con Pod-iDLADLA, un diseño de sólo 17 m2 en el que cabe una vida. ¿Os venís a Sudáfrica para conocerla?

Proyecto @  Clara da Cruz Almeida & Katy Taplin + Adriaan Hugo para Dokter and Misses 

Imágenes @ Pod-iDLADLA // Business Insider

No sé si estaréis de acuerdo conmigo, pero yo creo que cuanto más pequeña es una casa, más ingenio hay que desplegar a la hora de proyectarla. Buenos ejemplos de ello son un par de apartamentos de menos de 50 m2 que ya hemos visto aquí en el blog - uno de estilo masculino de 40 m2 y otro más femenino de 45 m2 - ambos del estudio ruso INT2 Arquitecture. Pero si ahí sus diseñadores hacían un magnífico trabajo de organización del espacio, qué deciros del que han hecho aquí la arquitecta Clara da Cruz Almeida, y los diseñadores Katy Taplin y Adriaan Hugo del estudio Dokter and Misses.

El modelo Pod-iDLADLA es un módulo prefabricado que no sólo se adapta a los gustos de los clientes en su interior, sino que además, está pensado para que, en un futuro, si las necesidades de espacio de sus habitantes aumentan, puedan añadirse nuevos módulos que encajarían a la perfección con los existentes y que, además, podrían posicionarse de diferentes maneras, facilitando que cada casa sea distinta. No obstante, en el hometour de hoy os quería hablar de minicasas, así que nos vamos a centrar en sus posibilidades como tal.

Sus 17 m2 se dividen en 2 alturas. Como podéis ver en los planos, la planta baja se divide en tres partes: por un lado tenemos un gran espacio para la cocina-comedor que se alarga hacia zona de estar exterior; por otro una zona de oficina-lavandería que, en un momento dado, podría servir como dormitorio de invitado(s); y, en medio de ambas, un pequeño cuarto de baño y un pasillo que, además de zona de paso, es también la ducha. La planta superior, a la que se accede por una escalera móvil, es el espacio del dormitorio, donde cabe una cama doble con espacio de almacenaje debajo, y una pequeña  mesita.

Fabricada con materiales respetuosos con el medio ambiente, otra de las características que me han enamorado de este módulo es la cantidad de luz que tiene. Además de las numerosas ventanas abiertas en el resto de paredes, uno de los tabiques del módulo es una enorme cristalera que convierte la luz en un elemento decorativo más. No sólo los huecos parecen más amplios, sino que las vistas también se convierten en parte del espacio.

Esa sensación de amplitud se potencia aún más con la combinación de colores y materiales empleados en toda la casa. Prácticamente todo el mobiliario es blanco, con alguna pieza en madera clara, igual que el suelo, y la encimera de la cocina y la escalera en gris mate. Junto a esos tres colores, un punto de negro en los textiles - con la ropa de cama y las cortinas de los armarios de la cocina -, y otro punto, rompedor, de naranja flúor en los cables de las lámparas, la cuerda que hace las veces de separador en la habitación, y la balda del baño.

Por último, el sistema de almacenaje vertical en cajas, y la estructura metálica negra de los ventanales y el porche exterior, le dan un ligero aire de diseño industrial, que nos recuerda que efectivamente lo es, y que estamos ante un módulo prefabricado, algo que a estas alturas prácticamente habíamos olvidado.

Si a todo eso le sumamos que cuando más pequeña es la casa antes limpias, menos desordenas porque el orden es parte del día a día, y además, si te mudas puedes llevarte tu casa contigo... una minicasa como esta me parece una solución ideal como casa para uno, para dos, y hasta para una familia en vacaciones.

Eso sí, me quedo con la curiosidad de conocer su precio exacto, aunque una frase de su web que dice "vivir en pequeño te ahorrará dinero en el largo plazo" me hace sospechar que barata, barata, no es... Llamadme malpensada si queréis, pero es que la rematan con un "también podría hacerte más feliz" que me hace pensar en que están intentando amortiguar el golpe, jajaja ;-P

Así y todo, soñar sí que es gratis, así que yo me quedo con otra de sus máximas: 

"Una vida más simple te permite concentrarte en lo que realmente importa: la experiencia de vivir".

¿No creéis que tienen toda la razón?

¡¡FELIZ SEMANA!!