DIY-RECETA: HELADO DE MAZAPÁN

Como dicen los irlandeses, "gracias a Dios... ¡es viernes!" (sí, ese T.G.I. que se ve encima del cartelito de los restaurantes "Fridays" es precisamente "Thaks God It's..."). Y, como es viernes, aquí nos toca preparar algún tipo de DIY, esta vez un DIY-Receta de la sección "cocinillas".



Y, aunque hemos cambiado de año, no hemos cambiado de máxima - ya sabéis, nos gusta aprovechar restos, gastar poco e intentar que la comida no acabe en la basura - por eso, nuestra receta de hoy es un helado de mazapán que, además de aprovechar los restos que no hemos podido terminar en Navidad - con tanta galleta y tanto roscón, ha estado la cosa muy reñida ;) - y darle un twist fresco e igual de sabroso a este típico dulce toledano :)



La receta que os propongo está inspirada en varias distintas que he leído aquí y allá en Internet y en alguna revista. Si la comparáis con otras, veréis que algunas utilizan nata, otras le añaden esencia de vainilla... al final yo he hecho un remix de todas para conseguir cumplir al máximo nuestra idea de gastar poco y aprovechar mucho. ¡A ver qué os parece!



Los ingredientes son los siguientes:

- 400 ml de leche entera.
- 200 gr de mazapán.
- 150 gr de azúcar blanco.
- 4 huevos.
- Una pizca de sal*.
- Una pizca de vainilla en polvo*.
   *Ninguna de las dos está en la foto por un despiste mío, pero no hagáis como yo, y no las olvidéis ;) 

Y, ahora que tenemos los ingredientes listos, hora vamos con los pasos:


Antes de hacer ninguna otra cosa, en dos recipientes distintos vamos a separar las yemas de las claras, reservando éstas últimas para más tarde (1). A continuación, ponemos la leche en un cazo y la vamos calentando a fuego muy suave (2). Mientras se va templando, seguimos con el resto de pasos.


En un cuenco, vamos mezclando las yemas con el azúcar. Para que sea más fácil trabajar yo os recomiendo echar la mitad del azúcar primero (3), batirlo bien (4), y cuando ya esté bien mezclado, echar la otra mitad (5) y repetir la operación.


Cuando está bien batida (6), añadimos la mezcla de yemas y azúcar a la leche (7) - que sigue calentándose - y lo removemos con fuerza con la varilla para que quede bien ligado (8).


A continuación, desmigamos el mazapán (9), se lo añadimos a la mezcla (10), y sin quitarlo del fuego, removemos bien hasta que el mazapán quede bien disuelto (11). Podemos hacerlo a mano o ayudarnos con la batidora, pero siempre con cuidado de que la mezcla no llegue a hervir porque, si lo hace, se nos cortaría. Cuando lo tenemos bien mezclado, lo retiramos del fuego y esperamos a que se temple.


Mientras la mezcla se enfría, cogemos las claras que habíamos reservado al principio, le añadimos una pizca de sal, y con ayuda de un robot de cocina las montamos a punto de nieve (12). Se puede hacer también con varillas, pero claro...  para que el resultado sea como el que veis en la foto (13) hay que tener mucha mano y no es mi caso, así que... ¡bendito robot!


A continuación, cuando la mezcla anterior ya está templada, la vertemos en un bol (14), le añadimos las claras montadas (15), y con cuidado y utilizando movimientos envolventes (16) vamos incorporándolas poco a poco a la mezcla.


Cuando todo está perfectamente ligado, le añadimos una pizca de vainilla en polvo (17), volvemos a remover y, para terminar, vertemos la mezcla final resultante en unos tuppers y los metemos al congelador... eso sí, no por mucho tiempo. Me explico... Necesitamos que los helados se congelen, claro, pero tenemos que evitar que se formen cristales de hielo en ellos. Para conseguirlo, tendremos que sacar los tuppers del congelador cada 30 minutos aproximadamente y removerlos con una cuchara antes de volverlos a meter. Repetimos este paso unas cuantas veces hasta que veáis que la mezcla ya tiene consistencia de helado. En mi caso, este paso tan entretenido tuvo toda la tarde ocupado al Sr.Padre, jeje, ¡que no se diga que él no ayuda en el blog! ;)


En nuestro caso, preparamos el helado de víspera, y después de pasar un día en el congelador, lo sacamos 15 minutos antes de preparar el postre y... ¡éste es el resultado! La textura es cremosa y el sabor a mazapán, mazapán :) Eso sí, antes de terminar, un pequeño consejo... en mi caso, como habéis visto, el mazapán que he utilizado no eran las típicas figuritas de mazapán, sino el resto de una figura grande - concretamente un cocodrilo cuyo interior estaba relleno de yema aún más dulce que el propio mazapán - por lo que, si os pasa como a mí, a no ser que seáis súper fans del dulzor... yo os recomendaría reducir la cantidad de azúcar indicada en la receta o, incluso, que directamente no lo incorporéis a la mezcla, y la sustituyáis por algún edulcorante tipo stevia, que os ayudará a darle a la mezcla el espesor necesario, pero con un poco menos de dulzor. Ya os digo que yo esta vez no lo tuve en cuenta y, aunque en mi casa ha triunfado, a mí personalmente me parece que está rico pero demasiado dulce. Ya sabéis... cuestión de gustos, pero yo prefiero avisar ;)


Por último, para decorarlo, en casa hemos usado un poco de todo: fideos de chocolate, bolitas de colores, almendras picadas, chocolate líquido... pero vamos, estoy segura de que con cualquier otro topping que elijáis estará igual de rico.

Ya veis de qué forma tan sencilla, sin heladera y aprovechando restos, hemos preparado un delicioso postre helado. Aunque ya os digo que a mí me ha quedado un poco dulce, para ser mi primera vez con los helados y teniendo en cuenta que el mazapán no es lo mío... creo que ha quedado bastante bien ;)


¿Y vosotr@s? ¿Tenéis alguna receta especial para aprovechar los restos navideños?
¡Contádnosla! Ya sabéis que por aquí nos encanta leeros ;)

¡¡FELIZ FIN DE SEMANA!!
... nos vemos el lunes ;)

16 comentarios

  1. No soy de mazapanes pero en helado me los comería seguro! Feliz finde!!

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    1. Pues tienes que probarlo, es diferente aunque sabe a mazapán ;)
      Bsts y feliz finde

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  2. Nos encanta el mazapán y tratamos de imaginarnos su sabor helado... ¡Sí, definitivamente debe estar delicioso! Aunque lo tendremos que probar otro año, en nuestras casas ya no queda ni un triste polvorón.

    Un beso enorme de las dos y feliz fin de semana

    J&Y

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    1. Pues mejor que no haya sobrado, eso es que habéis comprado lo justo, jeje!!
      Bsts para las dos y buen finde

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  3. Tiene que tener un sabor exquisito y sorprendente. Gracias por compartir la idea y la receta
    Besitos

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    1. A veces no sabes que hacer con los restos de comida y este helado me ha venido genial, jeje!!
      Bsts guapa y buen finde

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  4. Qué rico tiene que estar Mónica! Ahora mismo tomaríamos una copa de helado!
    Aunque no tenemos ni un cachito de nada,cero sobras,jiji!
    Muchos besos y feliz finde

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    1. La cosa es no tirar las sobras, así que sino quedan pues nada, jeje!!
      Bsts chicas y feliz finde

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  5. Cuando termine la dieta me daré un capricho y lo prepararé porque me encanta el mazapán. Qué bueno tiene que estar ese helado.
    Buen finde! Besos

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    1. Pues date un festín cuando acabes la dieta o el día que te apetezca, jeje!!
      Bsts guapa y feliz finde

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  6. ¡Mmmmmm!!! ¿Y la operación vikini? jajaja! Para más adelante ;) muack!

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    1. Ya te digo, lo de la operación bikini lo llevo fatal, jeje!!
      Bsts compi

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  7. Que dos cosas mas ricas has juntado, helado+mazapan, eso tiene que estar de muerte!!!
    Muchos besos!

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    1. Es una mezcla genial, para disfrutar a tope, lo tienes que probar Nika!!
      Bsts guapa

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  8. Que pecado!!! Menos mal que no soy fan del mazapán porque sino ibas a ser la culpable de que rompiera el régimen!

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    1. Mucho mejor, porque este helado pocas calorías no tiene fijo, jeje!!
      Bsts Ainhoa

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