Bueno... os digo lo del invierno porque con la ola de frío esta semana sólo pienso en el frío que hace, pero estos sacos de semillas son perfectos para aplicar calor seco a cualquier zona del cuerpo no sólo contra el frío, sino también contra las lesiones o los dolores lumbares o menstruales, por ejemplo. Pero, antes de contaros exactamente el paso a paso, os aclaro un par de cosillas sobre los materiales... bueno, tres ;)
Lo primero de todo es sobre las semillas. Después de investigar un poco por ahí y preguntar a algunas amigas que los tienen, la opinión más extendida es que las mejores semillas para el relleno son las de trigo porque retienen bien el calor y no cogen mucha humedad - dato fundamental si como yo, vivís no sólo en el norte, sino al nivel del mar, aquí humedad tenemos para dar y regalar ;) -, pero también hay quien las hace con huesos de aceituna o de cereza, o con semillas de cebada o incluso de soja.
También he leído y me han comentado que hay quien, además de las semillas, añade algún tipo de hierba aromática como laurel, lavanda u hojas de eucalipto, o incluso quien le pone unas gotas de esencia. Yo he optado por hojas de laurel porque eran las que tenía más a mano y me gusta su olor, pero vale cualquiera o, directamente, no añadir nada. Ponerlas o no, no afectará en nada a la eficacia de los saquitos, aunque eso sí, si las ponemos, al calentarlo en el microondas, esas hojas aromáticas desprenden su fragancia y la sensación es aún más placentera ;)
Por último, las telas. Como la idea es que el saco se va a calentar una y otra vez en el microondas, es mejor que el tejido sea 100% algodón y, a poder ser, tipo sábana. En mi caso, como ya sabéis, tengo la tienda repleta de retales, así que después de una investigación exhaustiva de las estanterías, encontré varios de la firma italiana Bassetti que, además de ser 100% algodón, son de muy buena calidad y con mucho colorido, así que me vino genial.
Dicho todo eso, resumimos...
Los materiales necesarios son:
- Tela, mejor si es tejido de sabana y 100% algodón.
- Semillas, yo he utilizado trigo, pero puedes usar otras, o huesos de aceituna o cereza.
- Hierbas aromáticas, puede ser laurel, lavanda, eucalipto o cualquier cuyo olor os guste.
- Regla.
- Boli de marcar.
- Tijeras.
- Aguja.
- Hilo.
- Plancha.
Y ahora sí, vamos con el paso a paso:
En primer lugar cogemos el boli de marcar - ese boli mágico que después se borra con sólo plancharlo -, y con ayuda de una regla, dibujamos las líneas de corte y cortamos con la tijera. No os digo medidas porque depende mucho del tamaño que queráis darle cada uno, pero normalmente la forma es cuadrada o rectangular. En mi caso he hecho cuatro sacos - uno por cabeza para que en casa no haya peleas ;) - así que corté varias telas en diferentes tamaños. Ya vais a ver que, boli en mano, vosotr@s mism@s veréis a ojo cuál es vuestro tamaño ideal.
Una vez que los tenemos cortados, marcamos con el boli las líneas por donde vamos a coser - dejamos un pequeño dobladillo de entre 1 y 1,5 cm. - y lo sujetamos con alfileres. De esta forma nos ahorramos la parte de hilvanar, que no está mal ;) Además, debemos acordarnos de dejar, en uno de los lados una especie de boca, una parte que de momento no coseremos, por donde más adelante daremos vuelta al saco y también introduciremos las semillas.
Llega el momento de la costura propiamente dicha. Para coser los sacos, en primer lugar cosemos los bordes de las telas con el zigzag de la máquina para evitar que se nos deshilachen, y después, cosemos las telas por el revés. Todo ello sin olvidarnos de dejar la abertura que os comentaba antes. Cuando lo tenemos, aprovechando esa abertura, damos la vuelta al tejido y, una vez que ya estén al derecho si, como yo, habéis decidido hacer un saco cervical, cosemos también el centro de ese saco - que será rectangular - para que se marquen como dos churros o morcillas y que así las semillas se adapten más fácil a la zona del cuello. Si os fijáis en la foto - no me salió muy enfocada, pero si pincháis sobre ella y la hacéis grande más o menos se ve - esa costura central no tiene que llegar al extremo para que las semillas fluyan entre ambos lados.
Una vez que tenemos todas las costuras hechas, planchamos los sacos y preparamos las semillas para introducirlas dentro. Mezclamos las semillas con las hierbas aromáticas y, con un folio preparamos un par de cucuruchos de papel que nos servirá para introducir la mezcla en los sacos.
Es el momento de llenar los sacos. Como veis en la foto, introducimos uno de los cucuruchos de papel en la abertura de cada uno de los sacos, y utilizamos el otro como paleta para ir cargando semillas e irlas introduciendo en los sacos poco a poco. Igual que no os podía decir medidas exactas de las telas, tampoco os puedo decir cantidad exacta de semillas que tenéis que introducir, dependerá de lo lleno que os gusten, y de las semillas que tengáis. El único consejo es que vayáis rellenando con cuidado y comprobando cómo van quedando.
Una vez llenos, el paso final es cerrar los sacos. Para eso, primero metemos los bordes hacia adentro y después, tenemos que coser a mano, y con cuidado de no derramar las semillas y las hierbas, las bocas que hemos dejado abiertas. Un consejo: la tranquilidad ayuda no sólo a que no se caigan las semillas, también a que las puntadas nos queden presentables, que siendo a mano no siempre es fácil ;)
Y ya está, nuestros sacos térmicos están listos para utilizar o para regalar a familiares o amigos, que seguro que agradecen un regalo tan calentito. Sólo una cosa más, recordad que para calentarlos sólo hay que introducirlos en el microondas, pero tened cuidado con el tiempo. Lo normal es que estén listos calentándolos entre 2 y 4 minutos, pero depende de la potencia de cada aparato, por eso lo mejor es que empecéis por 2 minutos y vayáis aumentando de 15 en 15 segundos hasta que encontréis la temperatura ideal para vosotr@s.
Y ahí sí que sí, en cuanto le hayamos cogido el punto a la temperatura, ya tendremos nuestros sacos térmicos calentitos y podremos disfrutar de su calor sano y natural durante mucho rato. Si sois frioler@s como yo, son lo más de lo más ;)
¿Qué os han parecido? ¿Os animáis a haceros vuestros saquitos térmicos?
¡¡FELIZ (y calentito) FIN DE SEMANA!!
¡¡Me flipan Mónica!! Soi adicta a estos saquitos... los tengo por todos los sitios, para los niños, para mí... jajaja! ¡Esto lo hago fijo! ¡Gracias!
ResponderEliminarDe verdad que quedan muy chulos y ya sabes..un gustazo, jeje!!
EliminarBsts compi y buen finde
Nos encantan estos saquitos, Mónica, y las dos los tenemos en casa, aunque no confeccionados por nosotras.... Un consejo a la hora de calentarlos en el microondas, introducir, junto con el saquito, una taza con agua. Al parecer hace que las semillas se mantengan hidratadas y duren más tiempo. Nos encanta la selección de talas que has elegido.
ResponderEliminarUn beso fuerte de las dos
J&Y
Gracias por el consejo chicas, aunque creo que por estas tierras tenemos humedad hasta dentro del micro,jaja!!
EliminarBsts para las dos y feliz fin de semana
No tengo ninguno pero vienen genial. Voy a tener que ir a tu tienda a por unos cuantos retales jejeje. Feliz finde!!
ResponderEliminarTu dime que te envío una tonelada ;)
EliminarBsts compi y buen finde!!
Hola Mónica! Hace años quiero hacer esos sacos y nunca me animé, me da un poco de temor hacer un incendio en la cocina,pero esto de usar tela de algodón que aportas me animan a hacer unos.
ResponderEliminarLos tuyos además de súper útiles se ven hiper lindos con esas telas tan coloridas.
Un beso!buen finde!
Hola Rosina, tienes que probarlo son un gustazo y por el miedo a quemar algo, puedes probar con menos tiempo hasta encontrar el perfecto, jeje!!
EliminarBsts guapa y buen finde
Qué chulos y prácticos Mónica. Aunque yo para estas cosas no tengo gracia, me han dado ganas de probar a ver qué tal. Buen finde. Besos!
ResponderEliminarDe verdad Alicia es un remedio genial para calentarte o aliviar algún dolor, prueba qué no te vas a arrepentir ;)
EliminarFeliz finde guapa!!
Yo tengo uno que me hizo una amiga y aseguro que son una gozada y los que llevan esencias u hojas tienen el beneficio de la aromterapia.
ResponderEliminarlos tuyos quedaron ideales, Monica, con esos bonitos tejidos y diversas formas `-^
Feliz finde!!!
Veo que ya eres de club Piola, estoy deseando irme a la cama con un saquito bien caliente, jeje!!
EliminarBuen finde y muchos bsts
Semillas con poder terapeútico, qué bueno, como siempre sabía algo del tema, pero no tan bien como tu lo has detallado, la telas que has escogido son ideales
ResponderEliminarBss
Eso cuentan María y natural si que son los saquitos, jeje!!
EliminarBsts guapa y feliz día
Nos encantan tus saquitos,nosotras tenemos los nuestros y son geniales,hacen muy buena labor.
ResponderEliminarTú lo tienes súper poder escoger entre tanta tela.
Feliz finde,
Besos de las dos
Ya chicas, yo por telas no va a ser, jeje!!
EliminarTambién estoy encantada con el calorcito que dan los saquitos ;)
Besazo para las dos y buen finde
Que suerte contar con tantos retales...yo estaría haciendo de todo con ellas.
ResponderEliminarTus saquitos me parecen una idea genial,ya que van muy bien. Yo sólo conocía con huesos de cereza. Gracias por el tip del relleno...a ver si lo pongo en práctica.
Podrías venderlos en la tienda ...seguro que más de uno de las compra.
Buen finde. Besos
Sofie, creo que las semillas de trigo son más pequeñas y se adaptan a todas las partes del cuerpo, pero tengo ganas de probar los de cerezas!!
EliminarBesazo guapa y feliz domingo
Yo los compre en Natura hace unos años y son un gustado. Ahora seguiré tu paso a paso para hacerlos en casa.
ResponderEliminar¡Muchas gracias!
Mil besos
Tienes que animarte Isabel, así los puedes hacer del tamaño que te parezca, jeje!!
EliminarBsts guapa y feliz día
hola Monica, me diste en el punto exacto, estoy recolectando semillas para hacer unas bolsas terapéuticas. Mis hijas me las han pedido, tengo las telas..y solo faltaba este empujón. el dato de las hojas aromáticas me encanta.y que gran idea has compartido.
ResponderEliminarBeso
Cuánto me alegro Doris, ponte a ello y pon unas hojas de eucalipto o flores de lavanda y ya veras que olor más agradable desprenden!!
EliminarBsts guapetona y feliz día
Gracias por compartir este tutorial, la investigación del saco, las semillas, etc por otra parte veo surtidísimo el área de telas, me encantaría dar un salto, como las consigues?
ResponderEliminarSaludos
Eli R.
Hola Eli, gracias por la visita y me alegro que te guste el post!!
EliminarLas telas son de mi tienda, vendo tejidos para confeccionar edredones, colchas, cortinas, etc..
Bsts y feliz semana
Jo que maravilla Mónica!! Ademas de monisimos, practicos!! Y que telas tan chulas!!
ResponderEliminarUn besazo!!
Ya sabes por telas qué no sea, Nika!!
EliminarBesazo guapa
Excelente explicación. Tenemos algún saquito comprado pero gracias a tus indicaciones igual nos animamos a hacerlos nosotras mismas, aunque esto de la costura todavía no lo tenemos dominado...
ResponderEliminarBesos
Hola Teresa, es super sencillo!! Atrévete qué no hay que coser mucho, jeje!!
EliminarBsts y gracias por la visita
Hola Moni! yo tengo una alumna que las hace con lavanda, pero estoy segura que con trigo son geniales también. Un mimo total estas bolsitas relajantes!!!
ResponderEliminarPues mira yo sólo de lavanda no las conocía, serán super relajantes!! Para las próximas que ya anda toda la familia pidiendo más, jeje!!
EliminarBsts Marcela
Que apañada!! Yo tengo uno comprado en un mercado artesanal y si...me parece que este finde va a tocar sacarlo!!!
ResponderEliminarDesde que los he terminado no me separo del mío, jaja!!
EliminarBsts guapa
hola como se llaman las semillas??
Eliminarhola monica yo quiero saber como se llaman las semillas...?
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